Hoy quería dedicarte algo especial, y tras buscar y buscar, encontré un momento que me hizo reflexionar mucho. Fue en un festejo unos meses antes de que partieras, dónde de regalo te di un CD de música que te gustaba y aunque absurdo, tu reacción al recibirlo, fue molestia por haber gastado mis ahorros en ello, yo solo quería agradarte, y me sorprendio tu actitud. Sin embargo, mayor fue mi asombroso cuando me hiciste saber los dos regalos perfectos que esperabas recibir de mi y no eran de tipo material, eran tan solo mi compañía y mi felicidad.
Es chistoso, que han pasado ya tantos años y he seguido enfocada en tratar de hacer regalos materiales como flores, velas o visitas físicas a tu última morada; y que no me acordara de ese detalle tan simple e importante. Ha tenido que llegar este instante, para darme cuenta que el mejor regalo que puedo ofrecerte, es completar la felicidad que querías que tuviera, abriendo mi corazón para liberarme del coraje y tristeza con que he vestido, y permitir que el perdón entre a sanar mi alma. Sé que esto requiere esfuerzo, pero estoy dispuesta a hacerlo, pues la recompensa será tu tranquilidad(de haber hecho un buen trabajo al educarme) y mi ganas de buscar la felicidad todos los días.
Quizá no este contigo físicamente, pero esto hará que te mantengas en mis pensamientos de manera linda y por mucho mucho tiempo hasta que volvamos a vernos.
Te quiero mami,
No hay comentarios:
Publicar un comentario